viernes, 22 de junio de 2018

Dos usos de la miel para el cuidado de la belleza



La miel si bien no se puede integrar dentro del grupo de los perfumes baratos, es un producto de origen natural que tendría que ser mejor considerado por parte de las personas que se especializan o trabajan en torno al campo de la belleza y de la estética.


En términos generales, la miel está llena de propiedades para la salud, siendo considerada como el edulcorante más sano que se puede encontrar. A su vez, la miel para la belleza cuenta con múltiples propiedades y usos, en donde algunos de ellos los vamos a reseñar a continuación.

Limpiador de poros con miel




Las enzimas que hacen parte de la miel pura son un muy buen insumo para garantizar la limpieza profunda de la piel, además de aclarar los poros de forma natural. Además, si se la combina con aceite de jojoba o de coco como se propone aquí, va a ser una mezcla perfecta para que la piel esté libre de bacterias que por lo general son las que ocasionan desequilibrios o erupciones.

Para usar la miel como parte de la limpieza de la piel, es necesario que en un recipiente se agregue una cucharada de miel cruda con dos cucharadas de aceite de jojoba o en su defecto de aceite de coco. Los dos ingredientes se deben integrar a la perfección.

Al estar listo, aplique sobre su piel limpia y seca, pero siempre haciendo masajes en círculos y evitando la zona de los ojos. Permita que actúe por un periodo de 15 minutos para enjuagar con agua tibia.

Exfoliante suave y natural con miel




La miel está cargada con antioxidantes y esta es una de las características principales del producto, sin olvidarnos de las enzimas, entre otros nutrientes con los que se propicia la limpieza e hidratación de la piel profundamente. En el caso determinado de combinar la miel con algo de bicarbonato de sodio se va a formar un exfoliante natural que es muy efectivo y que va a eliminar las células muertas.

En un recipiente mezcle dos cucharadas de miel con una de bicarbonato de sodio. Mezcle lo mejor posible para que se integren ambos ingredientes. Pase a lavar su rostro con agua tibia y frote con suavidad ese exfoliante mientras realiza una serie de masajes circular.

Con el anterior procedimiento se va a lograr un cutis que lucirá más bello y radiante, con la ventaja de ser un tratamiento natural.

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