Recomendaciones básicas para lograr una piel radiante y sana

En una rutina de belleza son muchos los factores y variables en las que se debe empezar. Por ejemplo, las colonias, perfumes y productos de belleza en general. Ahora bien, en este caso nos concentramos en cómo lograr una piel radiante y sana.

Dormir bien para tener una piel radiante y sana

Se suele tener en cuenta este factor, pero no siempre se lo valora lo suficiente. En realidad, descansar y dormir es una cuestión esencial cuando lo que se quiere es mantener una piel radiante. Son cada vez más las investigaciones que respaldan este vínculo entre una mala calidad del sueño y los signos aumentados del envejecimiento, al igual que una clara disminución de la función de la piel como barrera cutánea.

En conclusión y aunque puede parecer un tanto extraño en principio para muchos, para la promoción de la salud de la piel se debe hacer un esfuerzo por dormir entre 7 a 8 horas en el día.

Evitar malos hábitos para tener una piel ni radiante

Esta es una recomendación que se plantea a grandes rasgos, ya que debe existir una valoración sobre cuáles son esos hábitos que se tienen en la vida cotidiana. Uno de los ejemplos más comunes es el tabaquismo o el consumo en exceso de alcohol, ya que la apariencia de la piel se va a ver afectada notoriamente.

Rutina de belleza para la piel

En pocas palabras lo que se sugiere en este caso, es que siempre se realice un desmaquillado antes de ir a dormir y que los productos que sean seleccionados para la rutina de belleza en verdad correspondan con el tipo de piel que se tiene.

Protección solar para cuidar la piel

La exposición ante el sol es uno de los factores que más complemente la salud de la piel. Al respecto, la medida más inteligente y apropiada consiste en la prevención a través de la utilización de protector solar. Además de lo que se ha mencionado, es importante también recordar que el protector solar se debe usar incluso en los días nublados o de invierno.

Alimentación saludable

La dieta o alimentación que se sostiene en el día a día también afecta la apariencia y condición de la piel. Vale la pena evitar los dulces, azúcares agregados, productos ultra procesados, embutidos y la bollería industrial. Por el contrario, y que incrementar los cereales integrales, legumbres, frutas, vegetales, frutos secos, semillas, agua, pescados y carne magra.